Artritis canina

Compartir la vida con un can aporta grandes alegrías. Es el mejor amigo del hombre, siempre acompañando, siempre cariñoso, y formando parte de la familia. 

Con el pasar de los años, los perros también enfrentan diversas enfermedades cuando llegan a una edad avanzada, padecimientos como la artritis, siendo este el trastorno articular más común en ellos. Es una afección evolutiva que se caracteriza por la degeneración del cartílago articular y la formación de osteoporosis.

Un 20% de los canes mayores de un año empiezan a padecer de trastornos en sus articulaciones, pero los perros mayores de cinco años o más ocupan hasta un 95% de los casos.

Síntomas de artritis canina

Entre las manifestaciones más comunes está la rigidez al despertarse, cojera persistente, dificultad para levantarse, y dolor crónico. La cojera en combinación con los otros síntomas puede desarrollarse gradualmente, o aparecer repentinamente a continuación de un traumatismo menor, o de un ejercicio exagerado. También puede presentar pérdida del apetito y cambios en la conducta, como dejar de ladrar o ya no querer jugar.

Señales de riesgo

Edad: es uno de los factores más influyentes, tan sólo la mitad de los casos se presentan entre los 8 y 13 años de edad. Tamaño: el 45% de los perros que padecen de artritis son de razas grandes. Un 28% son de tamaño medio, y el 27% son perros pequeños.

Obesidad: es otro factor influyente por la carga que causa a las articulaciones.

Traumatismo osteoarticular: la cirugía articular estimula la aparición de la artritis. Predisposición genética a la artritis canina: más común en razas como Labrador, Pastor Alemán, Rottweiler, entre otros.

Tratamientos y régimen

Mantener al can en un peso corporal óptimo es de vital importancia para la prevención de las afecciones articulares, puede incluso evitarle cojeras.

La fisioterapia es una buena opción. Llevarlo a un programa de ejercicio regular moderado ayuda a mantener la movilidad articular, y evita la anquilosis (fusión) articular.

Los agentes inflamatorios no esferoides son los fármacos más utilizados en animales que padecen de artritis, debido a su eficacia para reducir la inflamación y aliviar el dolor de forma rápida.

Nutrición

Tanto en personas como en animales, se ha comprobado que hay una serie de suplementos dietéticos en el tratamiento de la artritis entre los que se destacan el sulfato de con-droitina, el cloruro de glucosamina, los antioxidantes, y ácidos grasos esenciales como el Omega 3. Lo ideal es mantenerlo con alimentos que contengan estos componentes.

Cuando se adquiere una mascota se debe estar consciente de que, al igual que los humanos, pueden padecer de enfermedades. Por eso, brindarle una buena alimentación y cuidados, como el llevarlo periódicamente al veterinario, es una forma de agradecer todo el cariño que el perro le brinda y le permite además, una mejor calidad de vida.